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VISITA AL MONASTERIO DE SANT PERE DE RODES

El Alt Empordà es una de las zonas más bonitas y con mayor encanto de toda Cataluña. Pero no sólo su costa, con rincones de cuento, es digno de una visita; su interior es tan o más bonito si le das una oportunidad. Eso es precisamente lo que yo hice y me encontré con una joya de gran valor cultural y monumental. Te dejo mi visita al monasterio de Sant Pere de Rodes y su historia.

Historia del Monasterio de Sant Pere de Rodes

En lo alto de la sierra de Verdera, muy cerca de Cap de Creus, se eleva uno de los conjuntos monumentales más interesantes para conocer el mundo medieval de toda Cataluña.

El Monasterio de Sant Pere de Rodes se convirtió en el más importante del condado de Empúries tanto por la relevancia de sus abades como posición relevante en la sociedad feudal, como por su papel como centro de peregrinaje gracias a las reliquias que custodiaba. Pero, ¿cuál es su origen?

Según su propia página web, sus inicios se pierden en el tiempo y las leyendas, pero se podría ubicar su inicio en el siglo X cuando un noble llamado Tasi y el conde de Empúries se interesaron por él. De ellos recibió grandes donaciones, preceptos y privilegios papales que le permitieron convertirse en abadía.

Entre los siglos X y XI, se construyó la iglesia de estilo románico que hoy podemos contemplar y el monasterio se convirtió en un importante centro de peregrinaje. La consolidación del poder y el prestigio de la abadía de Rodes se situará ya entre los siglos XII y XIII. Entre sus dominios, se incorporó Santa Creu de Rodes, un pueblo dedicado enteramente al comercio y la artesanía para atender las necesidades del monasterio. Su gran esplendor se alargará hasta el s. XVI. Entre sus muros llegaron a convivir hasta 250 habitantes.

Libro reliquia

Sin embargo, en el siglo XVI, las guerras, las malas cosechas y epidemias hicieron estragos en él y provocaron el repentino abandono de Santa Creu.

Entre los siglos XVII y XVIII, se sitúa una etapa de recuperación económica gracias a la expansión del cultivo de la vid que se vivió en Cataluña. Lo podrás ver tú mismo si echas un vistazo a las laderas mientras realizas tu visita al monasterio de Sant Pere de Rodes. Existe una gran extensión de terrazas de piedra seca que se construyeron en esa época para el cultivo de la vid.

Será ya en 1798, cuando los monjes decidieran abandonar definitivamente el monasterio. Poco después, con la desamortización de 1835, se produjo la extinción definitiva de la comunidad de monjes benedictinos del monasterio.

A lo largo del siglo XIX y parte del XX, el monasterio sufrió un proceso de derrumbamiento y abandono junto a una etapa de intensa expoliación. No será declarado como Monumento Histórico Artístico Nacional hasta 1930, momento en el cual se inicia un proceso de restauración que duró hasta finales del siglo XX. Esto fue gracias a un programa ambicioso de restauración y excavación arqueológica que permitió que personas de todo el mundo como tú y como yo podamos disfrutar de este entorno y esta visita sin igual.

Pueblo de Santa Creu

¿Cómo llegar a Sant Pere de Rodes?

La única forma de llegar al monasterio es en coche. Existe un parking gratuito con pocas plazas a apenas 5min caminando del conjunto monumental del monasterio y muy cerca, en sentido contrario, del pueblo de Santa Creu de Rodes.

Lo más recomendable es usar google maps y buscar la siguiente dirección para que te lleve al aparcamiento.

Si quieres asegurarte plaza, te recomiendo que vayas a primera hora.

Vistas desde el monasterio

La Visita al monasterio de Sant Pere de Rodes

Antes de empezar la visita al monasterio de Sant Pere de Rodes, hay algo que debes saber. Se le llama conjunto monumental de Sant Pere de Rodes porque en este espacio se reúnen tres elementos fundamentales que representan la sociedad feudal del momento. La Iglesia, en el monasterio de Sant Pere de Rodes; el Pueblo, en el poblado de Santa Creu, y la nobleza o el poder, en el castillo de Verdera.

De todos ellos, el único que tiene coste, y que verás más adelante, es el monasterio. El resto, medio en ruinas y en proceso de recuperación, es visitable de forma gratuita. Una visita que te recomiendo ya que estás ahí.

Ahora bien, ya sea en una visita guiada o por libre (tienes acceso a una audio guía con wifi muy completa), la visita tiene un recorrido muy marcado por los diferentes puntos de interés. La misma comienza en el patio de abajo seguida por la parte, seguramente, más controlada de toda la abadía, la bodega.

Disfruta del paseo por la misma. Se trata de un lugar aislado, oscuro y lleno de bóvedas y arcadas que dan lugar a diferentes salas. De lo más interesante de este primer espacio es que la parte sur está excavada en la roca de la montaña.

De la misma, pasando otra vez por el patio, llegas a la parte más impactante y espiritual de todas, la iglesia. Y si me permites, querido lector, una gran obra de arquitectura. Porque seas o no creyente, este lugar no te va a dejar indiferente. Existe un no se qué, un algo que te va a dejar con la boca abierta mientras lo visitas.

Déjate recorrer los rincones mientras disfrutas de los techos altos gracias a su sistema de reparto de pesos entre sus contrafuertes y bóvedas de medio punto. Disfruta de la ligera luz que apenas se cuela por las pequeñas ventanas mientras recorres sus pasillos laterales y su ábside como antaño hicieran los peregrinos.

Iglesia de Sant Pere de Rodes

Según la audio guía, se tardaron siglos en que fuera construida en su totalidad. Eso, y gracias a que se usó la roca madre como sistema de apoyo y soporte, permitió que se usaran técnicas más avanzadas propias del gótico. Una iglesia que tuvo que ser nivelada y que consiguió una altura sin igual pese a que no deja de ser eminentemente medieval y románica.

Del conjunto no quedan ni reliquias ni ningún rastro de su momento de gran esplendor en forma de mármoles, esculturas y piezas de gran belleza, pero puedes imaginarte cómo fue por el aire de misticismo que desprende y su arquitectura única.

La visita al monasterio de Sant Pere de Rodes continúa por su cripta, un espacio necesario para nivelar el terreno y construir el ábside. Desde él, llegas al claustro inferior, o el primitivo. El esplendor y la prosperidad que fue ganando peso en el monasterio a partir del s. XII, hicieron que este claustro se considerara insuficiente y se decidiera construir uno mayor. La topografía del lugar lo dificultó por lo que se soterró para construir uno en el piso superior más amplio.

Este lugar, al que accedes por una de las esquinas, es un auténtico remanso de paz. No en vano es el lugar de lectura, paseo y meditación que antaño usaran los monjes. De ahí pasas a visitar las estancias más prácticas de la vida monasterial como son el refectorio y la sala capitular. También están la portería y la despensa.

Claustro superior

Llega el momento de ganar en altura en la visita al monasterio de Sant Pere de Rodes. Para ello, se pasa de la plaza al sobreclaustro y, de ahí, a la torre y al campanario. En la visita, también pasas por el deambulatorio superior.

Hazme un favor y cuando llegues al medio del deambulatorio superior, gírate y mira a través de la ventana hacia la iglesia desde su punto más elevado y central y disfruta las vistas. Disfruta de un monumento de belleza sin igual y de una altura que parece imposible; de un rincón en el que, seguramente, te sientas insignificante a la vez que en la cima del mundo.

A partir de ahí, a la visita apenas le quedan unos minutos pasando por la capilla de Sant Miquel, el hospital, las sacristías, el palacio del abad y los huertos.

Pero cuando salgas, no te olvides de visitar el poblado de Santa Creu de Rodes y las ruinas del castillo de Verdera.

Vistas desde lo alto

La entrada: precios y horarios

El horario para la visita al monasterio de Sant Pere de Rodes actualizado de 2023 es el siguiente:

De martes a domingo, festivos incluidos:

  • Del 1 de octubre al 31 de mayo: de 10.00 a 17.30 h
    • Viernes, sábado y domingo de 10.00 h a 19.00 h
    • Lunes de 10.00 h a 17.30 h
  • Del 1 de junio al 30 de septiembre: de 10.00 a 20.00 h.

Cerrado los lunes no festivos, el 25 y 26 de diciembre y el 1 y 6 de enero.

El precio de la entrada es de 6€ la general y 4€ la reducida. Además, hay excepciones en las que la entrada es gratuita como para los menores de 16 años o el último martes de cada mes entre el 1 de Octubre y el 30 de Junio.

Si quieres asistir a la visita guiada, aquí te dejo el enlace para que sepas cuándo está disponible la opción y puedas aprovechar la visita al máximo. Dura 50 minutos y tiene un coste adicional de 4€ por persona. Se necesita reserva previa y, eso sí, normalmente es en catalán.

Si quieres la información actualizada para tu visita al monasterio de Sant Pere de Rodes, te recomiendo que eches un vistazo a su web aquí.

Reserva tu visita a través de este enlace

Y si estás por Cataluña y quieres visitar más lugares, te recomiendo mi sección de Cataluña.

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